Japa mala, códigos sagrados, 45 cuentas
Los códigos sagrados abren puertas que han permanecido cerradas para muchos, y logran cosas que Las Almas no han podido conseguir por otros medios. Los códigos se repiten 45 veces cada vez, ayudándose si es posible con un collar de cuentas. La repetición se hará como nos lo dicte el corazón y hasta que se produzan resultados. Al recitar un Código, la energía del que lo está usando, se funde con la del Ser de Luz al que se está invocando.
Blanco: pureza, paz, iluminación. Ayuda a conectarse con la propia esencia pura y a cultivar la paz interior.
Violeta: transmutación, trascendencia, inspiración divina. Se utilizar para transformar los pensamientos y emociones negativos en positivos.
Naranja: alegría, vitalidad, bienestar. Tiene un efecto tónico sobre el cuerpo físico, estimulando la energía. También se asocia con la mente racional y la claridad de pensamiento, ayudando a la concentración y la atención.
Rojo: fuerza, protección. Ayuda a proteger de las energías negativas o el miedo. Aumenta la confianza y el coraje del usuario, lo que lo hace menos susceptible a las energías negativas.
Celeste: paz, tranquilidad, serenidad. Puede colaborar a tener un efecto calmante y relajante sobre la mente y el cuerpo.
Rosa: amor propio, amor hacia los demás, compasión. Ayuda a conectar con el propio amor interior y a proyectarlo hacia el mundo exterior. Permite desarrollar una mayor conciencia del amor en la vida.
Azul: profundidad, intuición, espiritualidad, sabiduría. Contribuye con la conexión con el yo interior, a desarrollar la intuición y a alcanzar un estado de mayor paz y tranquilidad.
Verde: esperanza, renovación, vida, naturaleza. Para fomentar la esperanza en momentos de dificultad o incertidumbre.
Negro: renovación, nuevo comienzo. Representa la oscuridad, que se asocia con el potencial de transformación. Ayuda a dejar atrás el pasado y comenzar un nuevo capítulo en su vida, también se utiliza para concentrarse en la renovación espiritual.
Borravino: representa la tierra, la naturaleza y la conexión con la Madre Tierra. ayuda a la persona a sentirse más centrada y conectada con la naturaleza, a concentrarse en su respiración y en el momento presente, y a conectarse con su espiritualidad.
